Preocupado por lo que fue 2025, Manu López -dueño de Portlander- dijo que “otro año así no sé si nos bancamos”.
Portlander, la fábrica de cerveza de San Martín cerró el año con un tap room
Portlander, de la mano de Manu López e Inés Guerin, cerró el año, la semana pasada, con un último tap room: “Es abrir nuestra fábrica a nuestra comunidad, a nuestros vecinos, colegas, a la Unidad Industrial, a toda la gente de la Municipalidad, a toda la comunidad de San Martín con música en vivo”; explicó él a Reflejos en medio de charlas, cerveza y algo para picar, en su planta de M. Dasso 2402, San Martín, donde producen y también invitan a compartir reuniones y degustar buena cerveza artesanal.
Por vecinos para vecinos
Con un arraigo singular a San Martín, a donde mudaron su fábrica hace ya años, Manu dijo: “Creemos en este consumo local y responsable que tiene que ver con un menor impacto en el medio ambiente, es como consumir algo en el kilómetro cero. Cerveza artesanal local, fresca, hecha con ingredientes naturales, con fermentos artesanales, por vecinos para vecinos, entonces todo el beneficio de este ecosistema queda en la comunidad. Compramos las viandas a un emprendedor local, contratamos vecinos, entonces de alguno forma es como un consumo muy responsable y sustentable también”. Y, agregó: “San Martín tiene casi 500.000 habitantes y si todos esos eligieran consumir una cerveza local a todos nos iría mucho mejor; somos invisibles para nuestra comunidad; no nos conocen, es la realidad PyME, entonces esto del tap room, abrir la fábrica, es una forma de visibilizarnos; igual que el festival cervecero que hacemos de la mano de la Municipalidad en el Parque Irigoyen, como distintas iniciativas que hacemos en conjunto los ocho cerveceros de San Martín para ir, poco a poco, visibilizando nuestra realidad, nuestra economía y nuestros productos”
Terminando 2025, es casi imposible no hacer un balance y como la gran mayoría, Manu también lo hizo para este medio. Preocupado, contó: “Fue el año más duro de los 16 años que estoy en la industria cervecera, porque hemos perdido volumen, margen y un poco de mercado, porque hay clientes que han cerrado, los gastronómicos la están pasando mal, el consumo está muy deprimido y nosotros no somos la opción de compra más económica y en una situación de crisis la gente busca precio y obviamente hay alternativas más económicas para tomar una cerveza”.
Sin embargo, así como lo hicieron en la pandemia, en Portlander tienen una política de no reducir personal. “Creemos que de las crisis se sale por arriba y entonces nuestra estrategia es más diversificación, redoblar esfuerzos, hacer más eventos y distintas movidas para no dejar a nadie en el camino”, aseguró.
Y, en ese proyecto de generar para seguir competitivos, lanzan latas personalizadas por pedido o ante situaciones o acontecimientos especiales, como esta semana que sacaron a la venta la lata de Colapinto.
Ya con un pie en 2026 y sobre las expectativas de esta PyME cervecera de San Martín para el próximo año, Manu dijo: “No estoy muy esperanzado, esperemos que crezca un poquito por lo menos, que no sea peor que este año; otro año así no sé si nos bancamos”.
Y, para mejorar, el año que viene esperan poder hacer por lo menos cuatro festivales cerveceros en el Parque Irigoyen, porque “sirven, suman y vamos logrando comunidad; todo nos ayuda a tener más visibilidad, a que los vecinos nos conozcan y también concientizar para que después cuando tengan la oportunidad de consumo, que se acuerden que hay un vecino, a la vuelta, con un producto de buena calidad, con un valor relativamente competitivo y que los necesitamos”.
Mientras las chicas de Dopamina Grove se alistaban para tocar y antes de disfrutar su música cerveza en mano, Manu cerró: “Obviamente hacemos esto también para compartir, con la familia Portlander, con los empleados y sus familias, despedir de alguna manera el año; este es el último tap room, prácticamente en víspera de Navidad y Año Nuevo y, encontrarnos para nosotros es fundamental, esencial y compartir un poco lo que hacemos, lo que somos, nuestra vida y celebrar juntos porque ¡siempre hay motivos para celebrar!”



